Que les arruga la camisa o la blusa, que le molesta en el cuello o que les aprieta en el abdomen son justificaciones que nunca faltan para no llevar puesto el cinturón de seguridad. Incluso, aducir que es solo su vida la que está exponiendo es otra de las argumentaciones más reactivas, cuando a un conductor se le sorprende sin este dispositivo de seguridad.
En el caso de los motociclistas, el no despeinarse suele ser una de las principales razones para no utilizar el casco o lo llevan suelto o semi puesto para poder introducir el celular entre la cabeza y el casco mientras conducen (lo que implicaría otra falta de ¢113.000).
En resumen, por no llevar el casco colocado o llevarlo mal puesto, se suman 2.693 boletas, y por permitir esas conductas en el acompañante se alcanzaron, con corte a agosto, 1.522 sanciones.
Respecto al cinturón, son 4.672 las sanciones por no llevarlo puesto mientras conducen y otras 1.850 por permitir que alguno de sus acompañantes no lo llevara colocado.
“Con el cinturón de seguridad un tema que persiste con el tiempo, pese a que la actual Ley de Tránsito cumplirá 10 años en octubre, es que creen o convenientemente nos hacen ver que pensaban que solo las personas de los asientos delanteros deben ir sujetos y es un error básico que pone en riesgo la vida, en caso de un accidente. Tampoco es de recibo argumentar cosas tan banales como que el cinturón les arruga la ropa”, comentó Alexander Solano Quirós, director de la Policía de Tránsito.
Según estudios a nivel internacional, el no uso del casco aumenta en un 67% el riesgo de lesiones en la cabeza, lo que debería ser suficiente motivo para llevar el casco puesto siempre y bien.
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