Representante sindical de la CCSS denuncia persecución política y terrorismo de estado

A la clase trabajadora y a la Opinión pública: Martha Rodríguez González, representante sindical en la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), ha alzado su voz en una nueva denuncia contra lo que describe como persecución política y terrorismo de Estado. Rodríguez González, quien lleva dos años enfrentando un proceso disciplinario, asegura que estas acciones son parte de un esfuerzo sistemático por parte del gobierno para removerla de su cargo debido a sus posturas a favor de la clase trabajadora y del pueblo costarricense.

En sus declaraciones, Rodríguez González señaló que es la última representante de la anterior Junta Directiva de la CCSS, y considera que su defensa de los intereses de los trabajadores y su oposición a ciertas políticas gubernamentales la han convertido en un objetivo para las autoridades. «El que piensa diferente y el que defiende a la clase trabajadora es un enemigo para este gobierno», afirmó la sindicalista.

Martha Rodríguez González, representante sindical en la Junta Directiva de la CCSS.

Recientemente, Rodríguez González fue notificada de un nuevo procedimiento en su contra, el cual, según ella, tiene como fin intimidarla y forzarla a renunciar a su puesto. Sin embargo, dejó claro que no cederá ante estas presiones: «A mí me nombraron los trabajadores y yo no voy a renunciar solo porque a ellos les incomodan mis posiciones a favor del pueblo costarricense», enfatizó.

La representante sindical asegura que llevará esta situación hasta las últimas instancias, incluyendo acciones judiciales, con el objetivo de demostrar que está siendo víctima de una persecución política. «Seguiré defendiendo los intereses de la institución y de la clase trabajadora hasta donde sea posible», concluyó.

Este nuevo episodio se suma a un contexto de creciente tensión entre la administración actual y sectores sindicales, quienes acusan al gobierno de implementar medidas que van en detrimento de los derechos laborales y sociales.

La postura de Rodríguez González es firme: no tiene miedo al gobierno ni a las represalias que puedan surgir. Su compromiso, afirma, es con los trabajadores que la eligieron y con la defensa de la CCSS como una institución fundamental para el bienestar del pueblo costarricense.