La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) le aclaró a las empresas distribuidoras de electricidad, que no es obligatorio que los clientes coloquen el medidor en una caja metálica, junto con el interruptor principal (medio de desconexión).
La obligación para los abonados es que el interruptor se instale cerca del medidor, y no es necesario que quede visible en la vía pública. De esta manera el interruptor no queda expuesto al robo y vandalismo. Este equipo se puede colocar dentro de la propiedad o detrás del muro donde se ubica el medidor de electricidad.
Esta aclaración es importante para que la ciudadanía no incurra en gastos por un equipo que no es necesario para la instalación del medidor de electricidad y la habilitación del servicio eléctrico, cuyo costo en el mercado supera los ₡ 65 000,00.
La ARESEP enfatizó en que queda a criterio de la persona que solicita el servicio eléctrico, adquirir la caja o módulo integrado.
También la ARESEP indicó a las empresas operadoras el deber de comunicar esta disposición a sus equipos técnicos y a la ciudadanía, para evitar que incurran en gastos innecesarios y se reduzca el vandalismo que afecta económicamente a las personas abonadas.
