El periodista Camilo Rodríguez denunció públicamente lo que calificó como un atropello a sus derechos durante una hospitalización en un centro médico estatal. Según Rodríguez, su estado de salud fue interrumpido por la intervención de agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y personal de Medicatura Forense, situación que vinculó con lo que describió como una persecución en su contra.
En un video difundido en redes sociales, Rodríguez citó principios constitucionales para argumentar la violación de su dignidad y derechos fundamentales. Aludió específicamente al artículo 33 de la Constitución Política, que establece el principio de igualdad y respeto a la dignidad humana, apoyándose en resoluciones judiciales previas como la sentencia número 300 del 21 de marzo de 1990.
El periodista explicó que, durante su hospitalización de 15 días, su condición médica, bajo los efectos de medicamentos, le imposibilitó actuar con plena movilidad. Sin embargo, afirmó haber sido objeto de un trato injusto por parte de las autoridades mencionadas, quienes, según él, actúan bajo intereses ajenos al respeto de los derechos humanos.
Rodríguez anunció la presentación de un recurso de hábeas corpus con el apoyo de Mauricio Jiménez Aguilar, en busca de proteger su dignidad y garantizar sus derechos. Además, expresó que su lucha se centra en restablecer el vínculo con tres de sus hijos, el cual, según sus declaraciones, ha sido afectado por acciones que atribuye a un presunto «cártel de narcoabogados».
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