• 1485 casos son de abuso sexual de estos 1297 son mujeres y 188 hombres.
• Abuso psicológico es la segunda causa de violencia de mayor atención en la institución.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) registra de enero a octubre 2021 un total 5574 casos registrados en el Sistema de Vigilancia Epidemiológica (SISVE) por manifestaciones de violencia, de estos 4047 son mujeres, confirmó la doctora Elenita Ramírez, epidemióloga de la CCSS.
“Las manifestaciones de violencia que ha identificado la institución son negligencia y abandono, abuso sexual, psicológico y físico. El 2020 cerró con 4468 casos de mujeres atendidas en los servicios de salud por violencia, en diez meses del 2021 tenemos 4047 casos. En la institución y en coordinación con la Comisión de Prevención de la Violencia, capacitamos a los equipos de atención para que identifiquen estas manifestaciones y las registren” comentó la doctora Ramírez.
Datos del SISVE indican que de enero a octubre 2021 se registraron 1485 casos de abuso sexual de estos 1297 son mujeres y 188 hombres, 1100 casos de abuso psicológico, de estos 884 son mujeres y 216 hombres, en el rubro de abuso físico se registran un total de 1055 casos de estos 638 corresponden a mujeres y 417 a hombres, en cuanto a negligencia y abandono se reportan 916 casos, 442 son mujeres y 474 hombres, además hay 1018 casos de otros síndromes de maltrato, de estos 786 son mujeres y 232 hombres.
La epidemióloga indicó que el grupo de edad con mayor número de registros por violencia en el 2020 fue el 10 a 19 años con una tasa de 246 casos por cada 100 mil habitantes, seguido de los menores de 10 años con una tasa de 212 casos por cada 100 mil habitantes y en tercer lugar el grupo de 60 y más años con una tasa de 137.5 casos por cada 100 mil habitantes. Estos datos incluyen mujeres y hombres; en total se registraron de 6213 casos en el 2020.
El abuso psicológico está en el segundo lugar de las atenciones registradas por violencia en la CCSS. Kathia Castro de 56 años, es una de esas mujeres que tuvo que buscar ayuda para salir del maltrato.
Durante diez años vivió en depresión y pánico. “Pasé por un proceso muy duro, mi madre y dos hermanos murieron de cáncer, esto me afectó mucho, y mis hijos y esposo me empezaron a sobreproteger”, contó la mujer.
La angustia que estaba viviendo la llevó a fumar tabaco, sin embargo no se sentía bien con esta adicción y buscó ayuda en la clínica de Cesación de Tabaco del San Juan de Dios; ahí encontró a un equipo multidisciplinario que le ayudó a salir de la depresión y de la adición.
“Entendí que yo tengo una vida, y derecho a escoger que me gusta y que no, a donde y con quien salgo, nadie tiene que controlarme. La violencia tiene muchas manifestaciones, no todo son golpes o gritos, dichosamente desde hace cuatro años soy otra persona», detalló Kathia.
Imagen: Kathia Castro junto a Janicia Gamboa enfermera de salud mental del hospital San Juan de Dios.
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