CONMEMORACIÓN DEL DIA INTERNACIONAL Y NACIONAL DE LAS MUJERES
Manifestamos a la Opinión Pública:
- La sociedad costarricense no es pacífica, ni binaria, ni igual, ni equitativa, ni caucásica, que desde hace mucho tiempo ya nadie se atreve a llamarla la Suiza de América, ni los sectores más conservadores lo hacen. Ese imaginario nacional ha sido deconstruido porque nuevas voces se han alzado y se han posicionado en el escenario del país, esto ha permitido ir llenando vacíos legales que atentaban contra los derechos de todos los sectores poblacionales. Y que hoy grupos religiosos han asaltado el escenario político partidista y han convertido la religión en partido político oficial y luchan denodadamente por eliminar normativa y legislar según dictan sus credos religiosos, como los mejores sistemas teocráticos de la antigüedad. Los estados modernos no tienen credo religioso es una verdad que la anquilosada democracia costarricense se resiste a aceptar.
- Tenemos una amplia gama en la problemática de la violencia de género en todas sus manifestaciones, y esto constituye un escenario cuya solución no se vislumbra por ninguna parte. Los servicios públicos cada vez son más disminuidos y cercenados, de esto tenemos abundantes elementos probatorios, todo esto incide en la débil atención puntual de las mujeres. La situación es grave: violencia doméstica, violencia sexual, violencia callejera, violencia obstétrica, violencia en redes sociales, violencia en los territorios, violencia étnica, violencia laboral, violencia homo, lesbo y transfóbica, violencia contra migrantes, violencia política, trata de personas y explotación sexual, no son pequeña cosa, es la cotidianidad para miles y miles de mujeres.
- La desigualdad social y la inequidad están cobrando una cara factura a la nuestra sociedad, el sicariato se está apoderando de los barrios y pueblos en todo el territorio nacional, que el papel de las autoridades no es del todo claro en muchas ocasiones, igual suerte corre el papel de las instituciones. Que además no son hechos aislados sino parte de estructuras del crimen organizado, que actúa por la libre en nuestro país. Estas son señales nefastas de profundos y enraizados problemas de corrupción. Que la situación ha llegado a tal extremo que lideresas del movimiento feministas han tenido que abandonar sus domicilios y buscar protección judicial ante amenazadas directas a su integridad personal, que estos hechos son totalmente condenables y vienen a engrosar la lista de la violencia contra las mujeres.
- Rechazamos todo intento solapado de derogar la norma técnica que regula el acceso al aborto terapéutico, que nuestra colectiva tuvo el mes de julio del 2022 una audiencia con las máximas jerarcas del INAMU y nos negaron enfáticamente que esa fuera una posibilidad real. La vida de las mujeres gestantes no está en discusión porque nuestro ordenamiento jurídico así lo prevé desde hace más de 5 décadas. De atreverse a restringir o derogar la actual NT, el Estado costarricense enfrentaría serias consecuencias en materia de Derechos Humanos a nivel internacional, todo en detrimento de la vida de las mujeres y de nuestra tradición de respeto a los derechos humanos.
- Vemos con preocupación cómo una ley de empleo público entrará en vigencia cuando aún no se cuenta con la debida y correcta reglamentación, sin que se le hayan realizado las reformas necesarias para su correcta aplicación que garantice al sector trabajador público una justa remuneración por la prestación de los servicios públicos de calidad y eficientes.
- Reiteramos nuestro rechazo a las jornadas 4×3 por atentar contra las garantías constitucionales sobre jornadas laborales y pago de horas extras y de las normas internacionales de la OIT.
- Finalmente denunciamos que el actual gobierno es autoritario, populista y con alarmantes rasgos misóginos, que se vislumbran desde ese personaje llamado “la señora de Purral”, que es clasista, peyorativo y misógino, hasta la redacción de decretos contrarios a derecho, redactados en la sombras y penumbras de la no transparencia.
Las mujeres estamos en pie de lucha, conformamos un movimiento de defensa de nuestros derechos ganados y continuaremos demandando los que aún están pendientes.
No cederemos ante la arbitrariedad, el despotismo, la discriminación de quienes ostentan el poder político.
Alertamos a la ciudadanía que estamos ante un inminente peligro de retroceder en los derechos humanos que por décadas las mujeres hemos logrado.
Reafirmamos nuestro compromiso de defensa de nuestros derechos y de articularnos en alianzas con el fin de revertir estos intentos de cercenar nuestros derechos y nuestra ciudadanía.
San José, Costa Rica – 8 de marzo de 2023
Firma responsable: Yolanda Bertozzi
Créditos de Fotografías: Casey Childers
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos! ESTIMADOS LECTORES: Nuestro mayor reto es hacer sostenible un periodismo libre e independiente, que de voz al pueblo, sin conflicto de intereses, apóyanos a seguir promoviendo la libertad de expresión. | SUSCRÍBIRSE | INGRESAR | APÓYANOS