Un funcionario del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), quien trabaja en el departamento SENASA, ha presentado una denuncia detallada en el Ministerio Público sobre presuntos actos de acoso laboral y manipulación de documentos en su contra. El denunciante, quien ocupa el puesto de Técnico 3 Agropecuario, relata haber sufrido un accidente laboral hace dos años, lo que desencadenó un largo proceso de tratamiento y rehabilitación. Sin embargo, señala que durante este proceso enfrentó obstáculos en la tramitación de sus incapacidades, los cuales involucraron interferencia por parte de su jefe directo, el Dr. Luis Molina.
El denunciante ha expuesto en su denuncia que, a pesar de haber entregado la documentación médica correspondiente, el Dr. Molina en dos ocasiones intentó cuestionar las incapacidades, lo que complicó aún más su proceso de recuperación. En un correo fechado el 29 de agosto de 2023, Molina solicitó formalmente la incapacidad correspondiente, lo cual fue interpretado como una falta de comprensión o incluso un intento de obstaculizar su derecho a recibir tratamiento médico.
Además, el denunciante menciona que, ante la negativa de su superior a emitir la segunda nota solicitada por el Instituto Nacional de Seguros (INS), buscó apoyo en otros funcionarios del MAG, como Olman Solórzano, jefe de Salud Ocupacional, quien supuestamente alteró un documento importante relacionado con el caso. Según los informes, el formulario modificado fue entregado casi al final de una consulta médica, lo que generó sospechas sobre la integridad del proceso.
El denunciante también destaca la discriminación interna en SENASA, mencionando que existen diferencias significativas en el trato entre los veterinarios y otros técnicos, lo cual crea un ambiente laboral desigual y difícil de soportar.
A pesar de haber presentado diversas quejas tanto a nivel interno como ante la Defensoría de los Habitantes, el denunciante asegura que no ha recibido respuestas satisfactorias a sus demandas, lo que considera evidencia de un encubrimiento institucional. La falta de acción y la impunidad en el trato a su caso ha tenido un impacto negativo en su salud, llevándolo incluso a buscar atención psiquiátrica debido al estrés y la presión emocional acumulada.
Por último, el funcionario ha solicitado un traslado a otro departamento dentro del MAG debido a las condiciones laborales insostenibles en su actual puesto. Sin embargo, hasta la fecha, no ha recibido una respuesta clara ni solución a su situación.
Este caso refleja posibles irregularidades en el manejo de la salud laboral y el trato a los funcionarios dentro del MAG, y plantea la urgente necesidad de investigar a fondo las denuncias de acoso laboral, manipulación de documentos y discriminación en la institución. La falta de respuesta y la posible corrupción institucional subrayan la importancia de una revisión profunda de las prácticas laborales en el sector público para garantizar un trato justo y transparente para todos los empleados.
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