El Volcán de Fuego en Guatemala, uno de los más activos de Centroamérica, registró una fuerte erupción el pasado 9 de marzo, provocando la evacuación de al menos 1,000 personas en comunidades cercanas. La actividad volcánica incluyó explosiones de lava, ceniza y flujos piroclásticos, lo que llevó a las autoridades a declarar una alerta preventiva en la región.
Para el 11 de marzo, la intensidad de la erupción disminuyó, permitiendo el retorno de las familias evacuadas y la reanudación de actividades en la zona, incluyendo la reapertura de carreteras y centros educativos. No obstante, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) mantiene una vigilancia constante ante el riesgo de nuevos flujos de material volcánico.
El Volcán de Fuego, con una altura de 3,763 metros, está ubicado a 35 km al suroeste de la Ciudad de Guatemala y ha tenido erupciones significativas en el pasado. Las autoridades recomiendan a la población seguir informada y atender cualquier instrucción en caso de nuevas alertas.
