Quito. – El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, decretó un nuevo estado de excepción de 60 días en siete provincias y en el Distrito Metropolitano de Quito, a pocas horas de que el país acuda a las urnas para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
La medida, que también se extiende a todos los centros penitenciarios del país, se implementa ante el aumento de la violencia atribuida a bandas criminales. Las provincias afectadas son Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro y Sucumbíos, además de la capital.
El decreto contempla la suspensión de derechos constitucionales como la inviolabilidad del domicilio y de la correspondencia, así como la imposición de un toque de queda nocturno para limitar la movilidad en las zonas designadas.
Ecuador atraviesa una crisis de seguridad sin precedentes, con una tasa de homicidios de 38 por cada 100,000 habitantes registrada en 2024. La violencia ha sido uno de los temas centrales en la campaña electoral.
Noboa, quien busca la reelección, enfrenta a la candidata Luisa González, representante del correísmo. Las encuestas reflejan un empate técnico, y el voto indígena podría ser decisivo en este balotaje.
El estado de excepción, decretado en la víspera de los comicios, ha generado debate en la opinión pública sobre su impacto en el proceso democrático y la participación electoral.
