Una reciente denuncia del periodista Camilo Rodríguez destaca una serie de irregularidades en desalojos en la zona de Garabito, Puntarenas, y señala al abogado Celso «Cementazo» Gamboa como figura de influencia en actividades relacionadas con el narcotráfico y control de cuerpos policiales. La situación ha generado preocupación en comunidades locales que temen el desplazamiento de familias y el aumento de la criminalidad en áreas clave para el turismo.
En una nueva denuncia, el periodista Camilo Rodríguez expuso públicamente la presunta gentrificación en el cantón de Garabito, Puntarenas, donde, según Rodríguez, se estarían desalojando a familias de comunidades costeras para favorecer intereses privados. Se estima que más de 150 familias ya han sido desplazadas en áreas como Herradura, Jacó y zonas aledañas, y cerca de 1,000 familias más podrían estar en riesgo de perder sus hogares.
Rodríguez señaló, además, una presunta relación entre el abogado Celso Gamboa y actividades ilícitas en esta región. Según el periodista, el área turística conocida como el Peñón de Guacalillo habría sido convertida en un refugio para figuras del narcotráfico, presuntamente relacionadas con Gamboa. La comunidad local indica que este sitio, antes conocido por su atractivo natural, se ha vuelto un punto de reunión y protección para individuos señalados por delitos de tráfico de drogas.
La denuncia también destaca el supuesto poder e influencia de Gamboa en diversas instancias de seguridad y justicia en Costa Rica. Rodríguez asegura que Gamboa tendría control sobre varios funcionarios de alto rango, incluyendo miembros de la policía y del sistema judicial, lo cual ha llevado a la percepción de que el control efectivo sobre la seguridad en estas áreas se ha debilitado.
La comunidad expresa su preocupación ante la posibilidad de que esta presunta red de protección y el desplazamiento de familias favorezcan el aumento de la criminalidad en la región. Rodríguez ha solicitado que las autoridades investiguen el papel de Gamboa en estos desalojos y su posible relación con grupos de narcotráfico, dado el impacto potencial en la seguridad local y la estabilidad de Garabito.
Las autoridades nacionales aún no han emitido una declaración sobre estas denuncias, pero se espera que, de confirmarse, se tomen medidas para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de las familias en esta región clave para el turismo costarricense.
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