El personal de salud de la CCSS denuncian persecución por medio de medidas coercitivas para obligarlos a inocularse con la sustancia que no cumple con la finalidad para la que se supone que fue creada, hablamos de que la sustancia permite el contagio y permite contraer el virus, pero el argumento para mantener la obligatoriedad viene cambiando desde sus inicios.
Muchos funcionarios llevan 8 o 10 meses de no recibir dinero, tampoco han sido despedidos, lo que les afecta grandemente, aun cuando al parecer las suspensiones estaban amparados al Decreto de emergencia, que ha sido desactivado por otro decreto del presidente, donde el mismo mandatario indicó que no se debe perseguir a nadie, ni despedir a nadie. Pero al parecer el mensaje no llega a la CCSS, aun cuando en Rueda de Prensa el Sr Alvaro Ramos, presidente de la CCSS, y la Ministra de Trabajo, indicaron estar enterados, el presidente solicitó investigar al departamento jurídico de la CCSS que aparenta estar haciendole el favor a alguien.
