Oficiales de la Policía de Fronteras, destacados en el cantón de Los Chiles, frontera norte, evitaron que gran cantidad de fármacos contrabandeados, entre estos 18 frascos que contenían morfina, pusieran en riesgo la vida de potenciales consumidores.
El cumplimiento tuvo lugar en la localidad de Tablillas de Los Chiles, cuando los oficiales fronterizos interceptaron a una nicaragüense de apellido Bravo, la cual se encontraba en condición migratoria irregular tras ingresar por un punto ciego de la frontera norte.
La mujer había introducido al país, al margen de las diversas normas que regulan la importación de medicamentos, varios frascos y cajas que, en su mayoría, aparentaban ser productos de fabricación artesanal, pues incluso llevaban etiquetas hechas en impresora.
Entre estos supuesto fármacos que transportaba la nicaragüense, los oficiales encontraron 54 frascos similares a los que contienen soluciones inyectables, de los cuales 18 contenían morfina.
Tras solicitar la dirección funcional de la fiscalía local, esta ordenó el decomiso de los fármacos ante la evidente violación de la legislación sanitaria, además de tributaria, luego de lo cual fueron entregados a la oficina regional del Ministerio de Salud a fin de que sean destruidos.
Lo anterior debido al potencial riesgo que esos productos representan para posibles consumidores, pues ninguna autoridad nacional podría garantizar que el etiquetado realmente corresponda al contenido, o que los supuestos medicamentos se hayan transportado según las normas de salubridad vigentes en Costa Rica.
De igual forma la Fiscalía de Los Chiles ordenó remitir a la extranjera a la orden de la Policía de Migración para ser devuelta a su país, pues había ingresado a Costa Rica irregularmente.
