El reconocer las fuentes de información es de vital importancia, que quien se informa pueda hacer una diferencia entre una nota periodística y una nota de opinión personal. Para poder informar a la población es vital hacer esta diferencia, porque mi opinión como periodista ciudadano no necesariamente puede ser una realidad.
Por eso, hemos visto como profesionales en la comunicación sacan su opinión personal para etiquetar con mensajes de odio a costarricenses como “anti-vacunas”, pero es solo eso, una opinión personal que la emiten como si fuera una fuente oficial de información, por eso, esta misma nota usted la encuentra en una sección de nuestro medio llamada “opinión”, porque respetar a nuestros lectores es de vital importancia.
La prensa canalla, es aquella que vende su línea editorial por unas monedas, la que no separa sus notas comerciales de la noticiosa, y emite criterios personales, los cuales muchos son ideológicos, o sea, que tratan de imponer su forma de percibir la información y tratan de censurar lo que ellos no están de acuerdo. Es como si nosotros no publicáramos nada de la sustancia experimental que está impulsando la CCSS sobre el covid, porque al menos yo no creo en una sustancia que ha generado despidos, campañas de miedo, persecución laboral, y mensajes de odio contra quienes no creen en la sustancia por tener más información científica de la misma, donde desde muchos medios tradicionales incluso con mensajes de odio los señalan de desinformados.
Esto anterior nos hace pensar que como medio digital nuevo en Costa Rica, donde nos llega información tanto del pueblo como del gobierno, que pueden existir intereses económicos muy fuertes en el que las autoridades de los poderes de la República deberían estar investigando, ya que la maquinaria desarrollada para impulsar la sustancia y censurar el debate, le ha costado al país miles de millones de los impuestos, ¿están saqueando al país justificado en una emergencia sanitaria que no pueden comprobar científicamente?.
Y es que el debate público era una de las herramientas democráticas usadas desde las cámaras de los medios de comunicación, para garantizar los argumentos del gobierno, y cuestionarlos, de forma que muchos abusos desde el poder fueron expuestos, pero hoy parece más una mancuerna entre el gobierno y algunos medios de comunicación.
Sin datos científicos, sin demostrar las fuentes de información. Así se manipula ahora la opinión pública; con profesionales académicos, pero poco profesionales en lo ético, que van a exponer una opinión personal como única e irrefutable, evadiendo el debate público y científico, ¿será que no pueden sostener su opinión en un debate por no tener respaldo científico?.
Por eso, en nuestro medio hemos eliminado la sección de Nacionales, la separamos en “Pueblo” y en “Gobierno”, nosotros nos dedicamos a informar, pero principalmente buscamos garantizar que el pueblo nunca vaya a ser censurado, el devolver la voz al pueblo es vital para el equilibrio democrático.
Ahora, es responsabilidad de nuestros lectores identificar la fuente de la nota que nosotros publicamos, porque no queremos decirte como pensar, queremos que usted saque un criterio propio desde la información presentada, no podemos pensar por nuestros lectores. Y aunque emitimos notas de opinión como la presente, estará en la sección de opinión, no la vendemos como una verdad absoluta.
Por esta razón, que usted conozca la nota en nuestro sitio web es muy importante, no hacemos noticias en las redes sociales, pues en ellas se censura información de mucha importancia, al punto que los intereses comerciales controlan la big-data.
Opinión de Gerardo Ledezma.
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