Una manifestación convocada por sindicatos en defensa de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) tuvo lugar esta semana, con el objetivo de rechazar la posible intervención del gobierno en la institución. Los trabajadores aseguran que la CCSS no está en crisis financiera y enfatizan que «la Caja no se vende».
Representantes de la Unión Sindical de la CCSS entregan documento de peticiones a JD de la CCSS.
Doña Marta, vocera del movimiento sindical, subrayó que la CCSS no depende del financiamiento del gobierno, sino de las contribuciones de trabajadores y patronos, lo que convierte a esta institución en un patrimonio de todos los costarricenses. “Los políticos deben sacar las manos de la CCSS, ya que el gobierno no tiene autoridad moral”, expresó la dirigente, quien también advirtió que la intervención gubernamental pone en riesgo el sistema de salud pública y la seguridad social en el país.
El movimiento sindical busca hacer un llamado a la ciudadanía y a las autoridades para preservar la autonomía de la institución y protegerla de intereses políticos. Los manifestantes consideran que la CCSS es un derecho que debe seguir siendo defendido y administrado para el bienestar de toda la población, libre de injerencias externas que puedan amenazar su estabilidad y funcionamiento.