No son teorías de conspiración, son prácticas de corrupción. Desde el excesivo control del Estado y en concordancia con la corrupción en el gobierno de Venezuela, se utilizan las redes sociales de manera que encienden alertas en la ciudadanía de diferentes países. En gobiernos donde los presidentes deben alternar, estas herramientas pueden ser usadas para atrincherarse en el poder e, incluso, para censurar de forma solapada a quienes denuncian la corrupción.
Nota de France24
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos! ESTIMADOS LECTORES: Nuestro mayor reto es hacer sostenible un periodismo libre e independiente, que de voz al pueblo, sin conflicto de intereses, apóyanos a seguir promoviendo la libertad de expresión. | SUSCRÍBIRSE | INGRESAR | APÓYANOSEn Revista de Prensa abrimos con un reportaje del Centro Latinoamericano de Investigación Periodística que denuncia la persecución y acoso digital que civiles, dirigentes y líderes comunitarios de Venezuela han atravesado desde las elecciones del pasado julio. Entre los casos, señalan el de Raúl, cuyo nombre, fotografía y número de documento fueron difundidos por redes sociales, plataformas y chats vinculados a seguidores del oficialismo. Al igual que él, muchos salen en afiches de ‘se buscan’, incluso aunque no hayan participado en las protestas postelectorales.