Un nuevo escándalo sacude a la CCSS y al Ministerio de Salud: la Sala Constitucional investiga la distribución de 600.000 ampollas de diclofenaco inyectable con defectos de calidad, que fueron enviadas a hospitales y clínicas aunque el laboratorio oficial de la Caja ya las había rechazado.
Medicamento “no apto para uso” llegó a hospitales
Según el recurso de amparo presentado por la ciudadana Jimena Campos Vallejos, los lotes 24F45 y 24F46 —fabricados en China por Jiangsu Ruinian Qianjin Pharmaceutical Co.— fueron rechazados por el Laboratorio de Normas y Calidad de Medicamentos (LNCM) al comprobar que las ampollas contenían menos líquido del que declaraba la etiqueta.
El LNCM concluyó que los productos eran “no aptos para uso”, pero aun así la Gerencia de Logística de la CCSS autorizó su distribución en hospitales, sin advertir de inmediato a médicos ni a pacientes. En esta foto a la pantalla de Cicop se muestra que la inversión supera los 84 millones de colones.

¿Se jugó con la seguridad de la gente?
La denuncia asegura que el aviso oficial se dio días después de que los fármacos ya se habían aplicado, lo que impidió que los pacientes dieran su consentimiento informado. “Se jugó con la seguridad de la gente en nombre de evitar un desabastecimiento”, señala la acción judicial.
Funcionarios bajo lupa
Entre los nombres señalados aparecen:
- Dr. Esteban Vega, gerente de Logística de la CCSS.
- Licda. Adriana Chaves Díaz, Dirección de Abastecimiento.
- Dr. Alejandro Murillo, jefe del LNCM.
- Dr. Danny Cascante y Dr. Ignacio Calderón, del MINSA.
₡84 millones en medicamentos defectuosos
El caso también genera indignación por el costo: el valor de los lotes rondaría los ₡84 millones en dinero público.
Sala IV exige explicaciones
La Sala IV dio a la CCSS y al Ministerio de Salud un plazo de tres días hábiles para responder bajo juramento. Si se confirma lo denunciado, los hechos podrían marcar un antes y un después en el control de medicamentos y la rendición de cuentas de la Caja.


